Tres versos: Claridad

#55
Por un segundo, a ambos se nos pasó por la cabeza
que podíamos ser felices.
Después, amaneció.


#56
Ya no estaba entre mis deseos el evitar tus lágrimas,
ni entre tus metas el hacerme sonreír.
Es así como nos fuimos distanciando.


#77
Qué jodido fue descubrir que eras
una historia entre líneas que se perdió
en los puntos suspensivos...

Madrid, a 12 de marzo de 2013

Pequeña Libertad,

Es increíble que Madrid pueda volverse más frío que el dia que salio tu vuelo, pero aquí resisto en este piso que apenas da para un sofá y una tele. He vuelto a escribir, y creo que tengo algunos proyectos en mente, te hablaré de ellos cuando vuelvas, y así podrás decirme que mis ideas son tan malas como mis chistes. Me he encontrado con Susana y me ha contado que los negocios no van como antes, que cuesta mucho mantenerse a flote, y que ya nadie invierte en lo que de verdad importa. La veo triste, puede que reuna a la panda para la fiesta de la primavera, eso le animará.


Tus padres están pensando en irse de vacaciones a la playa, justo al mismo sitio donde nos conocimos hace ya tanto tiempo. Dicen que es la mejor época para no quedarse quieto, y la verdad, creo que tengo que aceptar su consejo. Empezar a moverme como tú haces, con las maletas ligeras y la sonrisa siempre dispuesta. Mi hermana también te manda recuerdos, debe ser que con el frío todos se acuerdan de los pequeños tesoros. Malos tiempos para vivir, Libertad, y para la cultura, para el arte, y para echarte de menos.


Cuídate mucho,

Guille.