Instantes

Durante un instante olvido el mundo
que nos rodea.
El ruido que ensordece
o los inhumanos que habitan el mundo.

Olvido el silencio de nuestro enfado,
o que esta cena que pretendía ser perfecta
se terminó con el sordo llanto de cristales rotos.

Durante un instante,
mientras nuestra voces no pronuncian nada.
Mientras las palabras hieren y la cura aún está lejos,
repaso las canciones que te honran.

Durante ese instante interminable, doloroso, inseguro.
Te miro y pronuncio te quiero.
¿Qué otra cosa hubiera podido decir
si odio que termine la noche si no me regalas tus besos?

Escena final de Casablanca

Este adiós es quizá,
el momento más lejano de tus besos.
La interrogación que responde,
en silencio, a nuestras dudas.

El perderte sin tenerte, y encontrarte
–casual- en una simple mirada.
Tan sencillo, como darme cuenta del presente.
O escaparme de espaldas a tus brazos.

O llorar. O bajar la mirada.
Dejar congelado cualquier reproche.
Tan difícil como despedirme de ti.

Este adiós consumido, es casi eterno
y al final, siempre nos quedará París.

El mundo casi eterno

Si he de quedarme con algo de
este mundo que nace en tus ojos azules,
en ese frío que es parte de tus manos.
en ese té caliente que encierra un gesto grácil.

En tu forma de sostenerlo.
En tu forma de desnudar mi alma
mientras me comes.

Si he de quedarme con algún verso.
o con algunas cartas que no se escribieron.
Cuentos que me inventaré para explicarte como te necesito,
o como te querré mejor.

Deseando verte en cada foto.
En las horas de mi despertador,
y a mi lado en la almohada.

Me quedaré con un pedazo de tu risa,
esa fina línea que perfila la alegría en tu rostro.
La fragilidad más dura y a la vez cristalina.
Tu manía de poner las manos frías en mi pecho.

Tu portal al despedirnos en silencio.
Las últimas gotas de luz.
Las primeras farolas estropeando el momento.

Pero sobre todo, si tengo que quedarme con algo,
entre todo,
me quedo con este último beso.

De miradas en distinta dirección




A lo peor llegue demasiado tarde,
o los silencios se hicieron más prolongados.
Más incómodos y duros en nuestros labios.

Mis contestaciones, lo sé, no eran tan dulces como antes.
Pero dolían los puñales de la confianza,
y las risas se enfriaron como las cenas
en nuestro restaurante preferido.

No había culpables ni culpa.
No había como esconderse de una angustia creciente.
Éramos dos náufragos en una isla,
mirando al horizonte deseando encontrarnos.

Sin saber –o sin querer saber-, que estábamos al lado.
Aunque no entiendo la diferencia entre tenerte al lado y lejos,
si ya no te tengo como antes.

Y así, te buscaba en el espejo y no te encontraba.
Será que yo no mirábamos en la misma dirección,
y todo era hoy más extraño.

De modelos y escritores

Ahora que te miro en carteles de revista,
descubro a una mujer diez años más vieja.
Un recuerdo enfrascado en la tormenta,
contándome que le fue mal.

Puede que las ofertas de felicidad prefabricada
llamen a tu puerta como a la mía las facturas.
Pero yo seguí escribiendo y encontrándome.
Y tú, perdiéndote entre olvido y ginebra.

Tratas de tapar con maquillaje las heridas del tiempo.
Esa arruga en el doblez del alma.
Esa inocencia perdida, no sé, en algún café de la plaza.
El preguntarme en silencio, ¿Te quedas?

Ahora el photoshop hace milagros,
incluso con esa sonrisa ajada que ya no sonríe.
O con esa mirada que planea decirme,
que cumpliste tus sueños, aún perdiendo la esperanza.

Días en los que no tenerte me harta

Me harto de los tópicos de amores fracasados,
de buscarme a mi mismo perdido entre los restos del naufragio
Y descubrirte como siempre, a mi lado.
Y mirarte de nuevo, y enredarme en las dudas que antes nos cohibían.

De estar cerca y no tenerte cerca. De verte y verme lejos.
De las viejas pasiones incendiarias que ahora son escombros,
Los viajes en los que conquistamos el mundo
en cualquier habitación de hotel.

Me canso de esperarte a que regreses a casa,
De que atravieses la puerta con calma y me abraces.
De este síndrome de Estocolmo voluntario.
Quererte demasiado en lugar de mejor.

Pero de lo que no me canso,
ahora que el sofá y la manta nos atrapan
es de salvar cada noche el mundo entre las sábanas.

Pasado y futuro entre tus miradas (Ahora II)

Ahora que el corazón se cuartea en los armarios,
y las paredes aprisionan los sueños.
Parece que se agota la vida en los cafés,
y nos sentimos más solos y más viejos

Que nos endeudamos de amor tras rostros sin nombre,
y nos arrepentimos de pecados que en su día cometimos.
Que las horas son minutos,
y a menudo o perdemos en lo que no echamos de menos.

Que te extraños y te reconozco
en cada verso esquivo de mi mente.
Que nadie se arrepiente más que yo,
de no haberte desnudado todo lo que quisiera.

Que odio cada uno de tus botones,
y me recreo en las curvas de tus vestidos de verano.
Que cada peca tuya es un mundo,
y mi mundo se reduce a tus labios.

Ahora que la soledad se diluye entre tus dedos,
el ron es más caro y sabe menos a juventud.
Ahora que disfruto mirándote en silencio,
y el presente se escapa…
…en lo que me levanto y me acuesto a tu lado.

En Barcelona

A pesar del calor asfixiante de Julio
De los paseos en metro que obstaculizaban
nuestros encuentros furtivos en las miradas.
De alejarnos y no encontrarnos los besos.

De que la fuente de Montjuic esté abarrotada de turistas
y tu y yo un poco menos solos.
De que flashes desalmados eclipsen la noche,
y te pierda en cada fotografía.

Sin embargo te encuentro a mi lado como siempre,
con tu mano susurrándome caricias silenciosas.
Con tu calor llenándome de vida.

Te encuentro más bonita de lo que te recordaba
segundos antes.
Más que las últimas dos mil veces que me perdí
entre tus pecas y tus ojos. En tus labios.

Te encuentro.
Sabiendo que no es la última vez que te encontraré
antes de buscarte entre las sábanas.

Arrepentimientos

Reflexionamos más y actuamos menos.
Por el miedo a vernos envueltos en la vida.
Para no querernos sin remedio y para siempre.
Y para no decirte cada día te quiero.

Somos un reloj de dudas sin tiempo.
Una causa perdida, una batalla vencida.
Una vida desde el banquillo. Sin vida.

Si al final reflexionamos
es por no actuar esta noche
en el escenario de tu cama.
Y arrepentirnos para siempre de mañana.

En la radio sonaba…

En la radio sonaba aquella canción de sueños rotos.
Estabas de espaladas y yo contemplaba
la cremallera de tu vestido.

Tus descuidadas formas calculadas.
La distancia que se antoja infinita
imaginando el roce más inocente de tus pechos.

Me preguntaba si el mundo podría detenerse
en ese instante,
o hacer eterno el beso más furtivo.

La realidad fundida con el sueño de verte a mi lado,
Frágil y fuerte entre mis brazos.
Arcángel custodio y santuario de mis noches

En la radio sonaba aquella canción
de siglos de gloria y presentes grises.
Estábamos frente a frente, mudos,
y la cremallera de tu vestido adornaba
los pies de la cama.

Carta a Oscar Perez, Montañero atrapado en el Himalaya

No sabría como hablarte, ni que decirte. No eres el primero ni serás el último. A buen seguro que tu nombre será silbado en la cima del Himalaya, cuando esta se halle acunada por el viento.

Me despido de ti con la palabra -la única forma de animar sin hacer ruido-, sin levantar la voz más allá de los angustiosos silencios del dolor.

Sé que tú conocías los riesgos, pero no puedes evitar que a tus seres queridos les duela tu pérdida, y ellos no pueden evitar que tu muerte fuese -a la vez- tu vida. Estás donde deberían morir los sueños de todos los montañeros, donde las nieves guardarán tus últimos deseos.

Supiste, desde el instante en que tus manos tocaron una cuerda, que la naturaleza -infinitamente más sabia que el hombre- unas veces aprieta y otras ahoga. Lucháste contra la montaña, aunque en realidad luchabas contra el mar embravecido, contra un tsunami, contra el desierto del Gobi o las estepas de Sibera. O la infinita crueldad que exíste en esta tierra. Luchabas por tí, por nosotros y por un sueño.

No puedes juzgar tus compañeros por intentar salvarte, aferrados al código del montañero, y el corazón en un puño. Las leyes no escritas de la palabra solidaridad.
Era su deber, y lo llevaron hasta sus últimas consecuencias, pero no pudieron salvarte de la naturaleza, de sus fauces silenciosas pero implacables, de la oscuridad.

Descansa en la montaña conquistada, mecido al abrigo de sus secretos inconesables.

Dos frases de tu boca

No es sencillo ni fácil.
Nadie dijo que lo fuera.
Pero ahora que hemos cenado juntos
y el vino era del bueno.
Ahora que suena Marwan en la mini-cadena
Necesito oír de tu boca dos frases:
Me quedaré esta noche.
Espero que no tengas sueño.

La noche es el espacio entre tus miradas y el alba

Hoy nos envuelve el calor como una espiral
de sonrisas y tardes a la sombra
de terrazas sin nombre.

Hoy nos embarga la pereza
de rayos de soles viejos sobre esta tierra
en la que tu y yo nos amamos en silencio.

Hoy es una de esas noches de balcones abiertos
y copas de vino.
De disfrazarnos de nosotros mismos.

Hoy se encuentran nuestros labios.
Son días infinitos y noches
que entre suspiros llegan al alba.

Hoy los versos se derriten y la prisa es más lenta.
Pesan los segundos y la distancia
entre nuestros cuerpos se convierte en una anécdota.

Hoy no hay dioses ni guerras preventivas;
ni pasado ni futuro; ni canciones melancólicas.
Sólo dos sueños que se besan a escondidas.

Crisis, elecciones y ultraderecha

Es significativo a la par que escalofriantes como convergen estos tres conceptos. Las crisis sociales siempre son vistas negativamente, como si los excesos del progreso nos llevaran a una situación de libertinaje que debe ser atajada con la mano dura de la ultraderecha. No deja de preocupar este hecho, puesto que, salvando las distancias, la victoria de Hitler, o el alzamiento del ejército español contra la legalidad vigente, fueron hechos propinados por una crisis económica, que derivó en una necesidad de cambio social.

Nos presentamos en el día postelectoral con la victoria de aplastante del retroceso. Europa dice no al progreso, a los inmigrantes, al avance de los derechos sociales. Con todo ello se dice que sólo importa el dinero, dando igual que Berlusconi roce la ilegalidad con su dictadura encubierta o que el PP español tenga, como en Inglaterra, la corrupción bajo la alfombra. Entre los recortes a los que nos veremos expuestos, yo empezaría a pensar en una Europa represora y con menos libertades.
A fin de cuentas, Jean-M. Le Pen no se aleja tanto de Musolini, Hitler o Franco.

Las batallas de Cupido

Todo me parece ridículo entre tu café y el mío.
Yo te cuento como fue el día,
mientras tu me desvistes con los ojos.

Te pregunto que tal el trabajo,
cuando quiero verte entre mis brazos y mis labios

Creo que empieza a ser ridícula la ropa
en esta playa nudista particular.
Los protocolos y los anclajes son como el viento,
y pienso en tenerte silenciando el mundo.

Apagando las luces del salón,
y en equilibrio entre comerte a besos
y acariciar tu cuerpo,
nos encontramos en esta encrucijada.

¿Cómo resolveremos,
si rechazamos las armas de cupido,
esta batalla?

Poema a Mario Benedetti

Una vida entre palabras.
Instrumento que nos hace diferentes.
Nos acerca a este mundo yermo y frío.
La impresión escrita de un sueño.

La filosofía personal e indescifrable,
a los ojos de quien no ha amado.
El perfecto verso de respuestas.
Las preguntas que no hemos pronunciado.

Apagón de faros desgastados,
por años e hipocresías.
Compromiso con la vida.
La lucha por vivir día a día.

El olvido que no permitiremos.
Abrazo de versos a la luz del vino.
En agradecimiento por quien caminó,
y andando, hizo el camino.

El tiempo que fue y será.
El incombustible paso a la memoria.
Mientras nuestro recuerdo te brinda
la mejor de las despedidas.

Un fragmento de este poema fue publicado en el diario público como sencillo homenaje a Mario Benedetti

Retroceso democrático

Sólo encuentro una explicación para que en un país donde las dos principales fuerzas políticas, siempre enfrentadas, juegan a zancadillearse los avances sociales, sean capaces de ponerse de acuerdo para retroceder en los principios básicos de justicia.
La explicación es el dinero y el interés político.

Pero lo peor de todo no es que vayamos a perder una referencia para el mundo entero en cuanto a justicia y solidaridad se refiere, sino que lo hagamos por la rastrera idea de ser invitados a la cumbre del G-8, cenar con Obama en la casa blanca o poder ir de turismo a una Palestina invadida por quienes nos compran nuestros productos. Restringimos la justicia para poder sentirnos más cómodos ante la infamia universal. Quizá menos responsables. En cualquier caso, se acaban de cargar la base de nuestro estado, cuando el congreso que nos representa pretende someter a un poder libre de su manipulación, como es la justicia. Ahora creo que la justicia, además de ciega, es esclava.

Nuestro ejército de Paz

Desde hace tiempo (la razón llega siempre tarde) leo mucho al periodista Javier Marías. En su artículo del domingo pasado hablaba sobre nuestro ejército, que para tranquilizar a “pacifista y tiquismiquis”, se ha convertido en un baluarte de la ayuda humanitaria. Se lamentaba que el ministerio no contemplase el uso de la fuerza salvo situaciones de seguridad propia o de quienes no pudiesen defenderse (pesqueros contra piratas).

He de reconocer que me siento orgulloso de un ejército que, pasado el mal trago de la invasión de Irak, se dedica exclusivamente a labores humanitarias que sin la posibilidad de usar la fuerza no podrían llevarse acabo. Nuestro ejército está preparado para entrar en un fuego cruzado de balas, pero no por ello debe entrar. No debemos olvidar que cuando un ente armado entra en un país (para ayudar o pacificar), está fuera de su territorio, y por lo tanto tiene que tener cuidado con sus acciones. Sin embargo, y como es el caso de Somalia, debemos proteger los intereses de España y de Europa, y proteger a nuestros barcos. No confundamos proteger con imponer nuestra ley, que ahí radica el conflicto de cualquier estado democrático.

La cultura no es sólo cine

Llevamos mucho tiempo leyendo que el cine español atraviesa una crisis de la que, por lo visto, nunca ha sabido salir. En un país donde el fracaso escolar llega a límites preocupantes, las leyes de educación cambian más de rumbo que los ministerios, y los estudiantes se revuelven contra el plan de educación que, pese a quien pese, nos abrirá las puertas a Europa, no es de extrañar que el cine, y cualquier actividad cultural, esté en decadencia.

Sin embargo, la ministra de cultura, hasta hace poco relacionada al mundo del cine, viene con aires renovados para hacer de nuestra cultura audiovisual la más puntera de Europa. La pregunta, como siempre, no es difícil. El cine, si, pero ¿Qué pasa con los libros? ¿Los museos? ¿El arte? Olvidados, es la palabra más común. Relegados a la imposibilidad de que jóvenes escritores o pintores salgan a la luz, pues total, en un mercado de cultura al por mayor, no interesa la gente culta, sino la masa adquisitiva, dócil y consumidora. A lo mejor la ministra tiene un rato y se acuerda del resto de artes.

Un buen tipo

Como ya ocurriese hace unos meses con Obama en todo el mundo, ilusión y esperanza de progreso, Patxi López ha venido a ser, en versión casera, una revolución en la política. Me gustaría saber la opinión real (y no la que cuenta la presa) de los ciudadanos vascos acerca del nombramiento de quien, a fin de cuentas, les va a gobernar.

Pero yo no quiero, ni puedo, hacer hincapié en su política. Simplemente quiero saber por qué no hay políticos como ese hombre que, siendo humilde y honrado como pocos, ha llegado a desbancar a todo un gurú del panorama nacional vasco. La única explicación es que es una buena persona, acorde a sus ideales y creencias, que no jura el cargo ante la Biblia (como tantos otros ateos/ agnósticos) porque no cree en ello. Sino ante el pueblo, a quien le debe fidelidad y por quien, durante cuatro años, se partirá el espinazo como un trabajador más. Socialista a la antigua usanza. De los de ideales, vino y tapa en la taberna, y arrimar el hombro cuando haga falta. Enhorabuena.

Ya no quedan

Ya no quedan -me dices-
lugares románticos en los que olvidarse del mundo.
Ni silencios cómodos, ni miradas lentas.
No queda, si quiera, oscuridad.

Me cuentas que hace tiempo que no ves,
Un paseo tranquilo por la acera.
Un niño jugando sin padres cerca.
O el beso más eterno entre adolescentes.

Puede -argumentas con paciencia-
Que ya no tengamos el mismo tiempo que antes.
Y que entre todos levantemos la maldición
de no tomarnos nada con calma.

Echas de menos los desayunos que hoy nos faltan.
El periódico imposible de leer, los poemas y el vino.
Pues ya no se puede tomar, mascullas,
Ni un café sin el maldito virus de la prisa.

Pides un lugar donde buscar mis labios
aunque yo no te bese. O busque estar solo.
Un lugar donde perderse lejos de la gente
y cerca de uno mismo.

Porque, maldita sea,
no tenemos tiempo ni para nosotros mismos.
Y al final lamentas
sólo poder desnudarme en sueños.

De vino y tormenta

Serán tus labios, que esta noche me seducen más que nunca.
O esta copa de vino que baila entre mis dedos.
El vestido nuevo, no sé, o tus andares.

Puede que sea esta tormenta que nos retiene en casa.
O la poca importancia que tiene estar solos.
Quizá sea, el suave vaivén de tus curvas.

Será que te hablo en silencio mientras te miro a oscuras.
Una irresistible necesidad de hacerte mía.
Amarte, con la lluvia resbalando en los cristales.

Puede que te desee como siempre,
y que entre la tormenta y el vino
sienta demasiada ropa encima y a ti muy lejos.

Lo que mandamos a Europa

Nadie sabe realmente si el PP quiere ganar las elecciones europeas o hacer méritos para acabar sin apoyos dentro y fuera de España. El cabeza de lista a las elecciones, el señor Mayor Oreja, anda dando traspiés a ver si, por casualidad, acaba dando con la clave del éxito. Y así ha encaminado su campaña hacia la grandeza, con la intención de arremeter contra las últimas medidas, pasadas o no, que ha hecho su contrario y rival. Una forma de política tan rastrera como improductiva a la hora de ganar votos. Porque, ¿Cuáles son sus intenciones cuando lleguen ustedes a Europa?

Pero lo más sangrante, producto quizá de su miopía para leer entre líneas, es el rechazo a la alianza de civilizaciones. Esta, como todo el mundo ha oído, va destinada a tender puentes entre occidente y el mundo árabe. Pero que, si apelamos al concepto, esta alianza se basa en la unidad de naciones para el progreso de la humanidad. En resumen, y para que el señor Mayor Oreja lo entienda, Europa es a su modo, una alianza de civilizaciones próspera. Ahora, háblenos de su programa político.

Financiación y soborno

Si bien es cierto que las autonomías en España es un tema escabroso que con seguridad acaba pasando factura a todo gobierno central, lo de Cataluña me suena más a un soborno estilo “El padrino” que a una solución a la financiación autonómica.

Sin embargo, resulta más preocupante la pasividad del resto de ciudadanos españoles ante esta muestra de favoritismo y extorsión. El vicepresidente Chaves, puesto ahí para suavizar la revuelta catalana, premia las ínfulas separatistas con más dinero, alegando que lo merecen. Y yo me pregunto el porqué. Será, quizá, por tener varios partidos bloqueando el parlamento nacional, o porque sus gentes gritan más fuerte que otras comunidades. O será porque en España el que no llora no mama, y así, cualquiera saca un real al negociador. En realidad creo que la culpa la tienen las comunidades como Castilla y León, que pudiendo votar a quien luche por no ser pisada, sigue votando a la misma inactividad desde hace demasiado tiempo. Y así, con indignos representantes en el cargo, estamos siendo cada vez más viejos y más invisibles.

Contradicciones necesarias

Cómo vamos a crear sueños o castillos en el aire.
Cómo habitaremos utopías e ideales.
Si a un niño se le enseña antes a odiar que amar.

Si sabe pegar mejor que besar.
Si aparece antes la envidia que la bondad.
La ley de querer más y no querer.

Y si en lugar de crear sueños o castillos en el aire.
Y si en lugar de utopías e ideales.
Nos dedicamos a tender puentes a la vida.

Y ya que estamos, a vivirla.

Siempre estuviste en el mismo sitio

Allí estabas con tu cansado desastre
Alejando de ti todo el rumor de noches sudadas
entre sábanas de cuartos sin ventanas.

Eras el contrapuesto de la fortuna
en un intento fallido de ganar un farol a la vida.
Y sin embargo, que quieres que te diga,
eras preciosa.

Un nido vacío de botellas con mensajes ocultos.
Auxilio con 50% de volumen.
Una hilvanante tempestad de los sentidos aturdidos
por el ruido de tabernas en tu ropa.
Y aun así, la vida consumida, eras eterna.

O quizá era yo el me movía,
y ahora te miraba desde otra mesa,
desde otros versos y cuerpos bañados en sudor.
Con el distante viento que nos devolvió a la realidad
que nunca quisimos.

La caza de inmigrantes

La nueva ley de inmigración contradice cualquier declaración de derechos humanos. Y viniendo de un gobierno socialista, también la ética, la ideología, y su propio programa político. No puede entenderse que hace unos años regularizasen la situación de los inmigrantes sin papeles y ahora, dos años después, les cacen por cupos.

Hemos retrocedido mucho, máxime cuando en España tenemos una deuda histórica con los mismos que vienen a trabajar y que, burocracia mediante, no pueden si quiera quedarse. No es demagogia barata hablar de los años en que emigrábamos en busca de un futuro a secas. Sin cualificación, ni medidas salariales ni contratos de origen. Pero el tiempo es caprichoso y la memoria selectiva, y ahora el gobierno desarrolla una ley que convertirá a aquellos que creemos en la solidaridad de los pueblos por encima de todo, en mero delincuentes. Y a aquellos que creen que el futuro puede cambiar, en presas de caza mayor.
Con el debido respeto, rectifiquen.

Noticias favorables y no tan favorables

Resulta curioso que en determinados medios los titulares acosen al gobierno, declarando su más que evidente desgaste por una crisis que (En España siempre somos diferentes) parece sólo ocurrir dentro de nuestras fronteras. Y digo esto porque la oposición, en su trabajo de quejarse, no parece entender que el gobierno no puede hacer nada por el derrumbe de Wall Street.

Lo más curioso es que estos mismo medio empeñados en que nuestro país está en una pandemia de hambruna por culpa de nuestros dirigentes, hacen oídos sordos a las tramas de corrupción, estafa, caciquismo y delitos varios que parece asediar al otro lado del hemisferio del congreso. Quizá, antes de pedir dimisiones en los responsables del paro, la economía o l lluvia ácida, podrían darse un paseo por la calle Génova a ver si hay alguien dispuesto a pensar, si quiera de refilón, en el futuro de España.

Su minuto de gloria

En España la política se mueve a través de titulares. De ahí que en este país haya peores políticos que publicistas. O quizá los políticos sean más publicistas que otra cosa. Y es difícil el arte de salir en un periódico, ser portada, ganarte tu papel en la triste historia social de infamias y desprestigios, y dormir bien por la noche.

Difícil conjugación que el peor de los dirigentes de nuestro país lo lleva como bandera. Y con esto no es de extrañar casos como el del Señor Fabra o Enrique Mújica (Defensor del pueblo) llamando a los antitaurinos palabras desafortunadas. O el caso de una iglesia en decadencia que usa la fuerza del dedo acusador como instrumento de manipulación social. Una lista que en otros países se corta de raíz, aquí se oculta bajo la alfombra de la cotidianeidad, enseñándonos a fuerza de años, que la justicia, además de ciega y sorda, es amiguísima del poder.

Sermones pasados y presentes

Que la iglesia es peligrosa es de sobra conocido. Con una larga lista de etcéteras se sitúa a la cabeza de las mayores barbaries en nombre de Dios. Que le gusta el poder tampoco nos coge de sorpresa, y se empeñan en demostrarlo jugando al juicio final en la tierra con cada sermón del Señor Ratzinger. Ni siquiera a un neófito en política se le puede escapar que la iglesia siempre ha cojeado de derechas cuando se mete a bucear –muy profundo- en las aguas de la política.

Debe ser que un ente institucional tan retrógrado como este sirve a unos intereses que los ciudadanos normales –es decir, racionales- no entienden. Y en medio de todo este revuelto de lazos blancos con ajillo, la derecha y la iglesia –a menudo juntas y revueltas- han decidido liarse la manta a la cabeza y asaltar, si en estos tiempos es posible, la bastilla de la moralidad humana. Poseedores de la verdad absoluta, y sin rival posible a los ojos de Dios, se empeñan en demostrar que la tierra es plana, el ser humano ignorante por naturaleza y los preservativos se fabrican 90% látez, 10%VIH. Digno del mejor Edgar Allan Poe.

70 años de silencio

Una de las cosas que más lamento de la educación que se recibe hoy en día en los colegios e institutos, es la falta de rigor histórico. Ese pacto de silencio heredado de un tiempo de inestabilidad y de esperanza frágil.

No es de extrañar que un joven no sepa los motivos del levantamiento militar que llevó a España a una dictadura. Pues son precisamente los partidarios del dictador quienes glorifican sus actos mientras que los republicanos callan para no desestabilizar. Seguimos reprimidos por un halo invisible de datos falsos de muertes equidistantes. Mientras ellos tienen el valle de los caídos, nosotros seguimos con la vergüenza de buscar en la tierra restos de nuestro pasado.

Sin embargo, La respuesta es clara. Llevamos 70 años sufriendo de recesión intelectual, quemando los valores del nuevo siglo. Matando a quienes hacían progresar esta tierra y quienes, fallecidos o en el exilio, sólo pudieron llorar por la España que se había ido. Y que, tristemente, aún no ha vuelto.

Lo que descubrí mientras te miraba en sueños

Empiezan las vacaciones, y yo tomo un tren hacia el norte para situarme a los pies de la montaña. Allí, donde le tiempo pasa frío y tranquilo. La calma. Y yo, mirando paisajes nevados, abrazado a tí como qien espera no volver a verte, me disolveré en tus caricias y besos.


Descubrí lo que valías con mirarte a los ojos,
Aunque tú te empeñaras en disimular
entre inseguridades.
Ahora sé que eres mi contradicción más fuerte.
El cristal irrompible; El delicado metal
La dura fragilidad en lo imposible; La vida
al verte caminar

Descubrí tus sueños al soñarte,
Y esa estúpida forma de hacerme perder
la vergüenza.
Tu compleja simpleza; Y a la vez ese
rompecabezas cuando te da por pensar
en espiral.

Descubrí tus desastres y los hice míos.
Y esa odiosa forma de provocar
-y hacerme perder el equilibrio-
cuando hay gente y no te puedo desnudar.

Descubrí tu risa ingenua y atrevida:
Acurrucada en el sofá, haciendo calculados gestos
para que te abrace.
Y yo –que siempre soñé con hacerte feliz-
besando los segundos a tu lado.

Descubrí que me sacas de quicio.
Y que pierdo la razón en tus labios y caricias.
Que eres el equilibrio que me rescata
De noches inmersas en alcohol y ruido.

Descubrí –y nunca me alegré más de ello-
que te necesito.
Hasta esa puta manía de hacerme cosquillas.
La guerra que le dimos por la noche a tu colchón


Os dejo un poema porque no volveré hasta dentro de una semana. Os deseo buenos días a todos y que disfrutéis. Nos vemos pronto.

Respuesta sacada de un disco de Chaouen

Antes de dejarme preguntaste:
¿Cómo vamos a pagar tanta deuda
de amor pendiente?

Tenías poca ropa y un piercing en el ombligo.
Yo era más gordo y más distraído.
Conjugabas en verbo mañana con más salero
y yo era más dado a las matemáticas.

Te fuiste en silencio,
aguando el vodka en más lágrimas
y como siempre preguntando:
¿Seguirás aquí mañana?

Éramos torpes amantes,
pero desde aquella noche han llovido versos y sudores.
He revuelto demasiadas sábanas bajo la promesa
de que la siguiente sería eterna.

Pero tu respuesta siempre era la misma:
El amor que vuelve nunca es el que tu esperabas.
Quizá me esté volviendo loco.

No quiero que vuelva tu piercing,
sino la odiosa manía de dar respuesta
a preguntas no hechas.

11 de Marzo de 2009

Hace cinco años, un día como hoy, mi prima cumplía 9 años. Pero nadie la felicitó como se merecía. Y no porque no pudiésemos, sino porque lo hacíamos con lágrimas en el alma. Porque nuestro corazón -a menudo más sensible de lo que este mundo intenta hacermos creer- estaba encongido, asustado, incrédulo.

¿Quién? ¿Qué? ¿Cómo? pero sobre todo ¿Por qué?

Por aquel entonces no podía votar. Pero de haber podido hubiese ido a cada uno de los colegios a votar por la paz. No mas muertes. Esto debe hacernos aprender y mirar atrás cada vez que levantemos nuestra bandera de odio. Pero señores, esto es España. La triste España que vende a su madre por un escaño en el parlamento.

Así, como el viento que se lleva las palabras, los homenajes, y los recuerdos, aquel fatídico día de Madrid se quedo en la memoria, en unos cuantos esloganes políticos y en cada uno de nosotros. Una espina clavada en la certeza de que la guerra sólo genera guerra. El odio, odio.

Este es mi pequeño homenaje a todos aquellos que, al revés que mi prima, que hoy cuenta 14 primaveras, no volverán a cumplir. Hoy, no la felicitaré con toda la alegría que me gustaría -aun se empeñan en jugar con la memoria de los que no volverán-.



Pero hoy, con mi recuerdo, no será un día más.



Para que nunca olvidemos, para que recordemos. Para que aprendamos.

Abad Quijada Eva Belén, Abril Alegre Oscar, Acero Ushiña Liliana Guillermina, Aguado Rojano Florencio, Alonso Rodríguez Juan Alberto, Álvarez González Maria Josefa, Andrianov Andriyan Asenov, Aparicio Somolinos Maria Nuria, Arenas Barroso Alberto, Astocondor Masgo Neil Hebe, Ávila Jiménez Ana Isabel, Badajoz Cano Miguel Ángel, Ballesteros Ibarra Susana, Barahona Imedio Francisco Javier , Barajas Díaz Gonzalo, Bedoya Gloria Ines, Ben Salah Imddaouan Sanae, Benito Samaniego Rodolfo, Bodea Anca Valeria, Bogdan Livia, Brasero Murga Florencio, Bravo Segovia Trinidad, Bryk Alina Maria, Budai Stefan, Budi Tibor, Cabrejas Burillo Maria Pilar, Cabrero Pérez Rodrigo, Calvo García Milagros, Cano Campos Sonia, Cano Martínez Alicia, Carrillero Baeza José Maria, Carrión Franco Álvaro, Casas Torresano Francisco Javier, Castillo Muñoz Cipriano, Castillo Sevillano Inmaculada, Centenera Montalvo Sara, Cisneros Villacis Oswaldo Manuel, Ciudad Real Díaz Maria Eugenia, Contreras Ortiz Jacqueline, Contreras Sánchez Maria Soledad, Criado Pleiter María Paz, De Benito Caboblanco Esteban Martín , De Las Heras Correa Sergio, De Luna Ocaña Miguel, De Miguel Jiménez Álvaro, Del Amo Aguado Juan Carlos , Del Río Menéndez Marta, Del Río Menéndez Nuria, Diac Nicoleta, Díaz Hernández Beatriz, Dima Georgeta Gabriela, Dimitrova Paunova Tinka, Dimitrova Vasileva Kalina, Djoco Sam, Dos Santos Silva Sergio, Duran Santiago Maria Dolores, Elamrati Osama, Encinas Soriano Sara, Fernández Dávila Carlos Marino, Fernández Del Amo Maria, Ferrer Reymado Rex, Figueroa Bravo Hector Manuel, Frutos Rosique Julia, Fuentes Fernández Mª Dolores, Gallardo Olmo José, Gallego Triguero José Rail, Gamiz Torres Maria Pilar, García Alfageme Abel, García Arnaiz Juan Luis, García Fernández Beatriz, García García-Moñino Maria De Las Nieves, García González Enrique, García Martínez Cristina Aurelia, García Presa Carlos Alberto, García Sánchez José, García Sánchez José Maria, Garrote Plaza Javier , Geneva Petrica, Gil Pérez (Y Feto) Ana Isabel, Gómez Gudiña Oscar, González Gago Félix, González García Angélica, González Grande Teresa, González Roque Elías, Gracia García Juan Miguel, Guerrero Cabrera Javier , Gutiérrez García Berta Maria, Hermida Martín Pedro, Iglesias López Alejandra, Itaiben Mohamed, Izquierdo Asanza Pablo, Jaro Narrillos Mª Teresa, Kladkovoy Oleksandr, Laforga Bajon Laura Isabel, León Moyano Maria Victoria, Lominchar Alonso Maria Del Carmen, López Díaz Miriam, López Pardo Mª Del Carmen, López Ramos Mª Cristina, López-Menchero Moraga José Maria, Macías Rodríguez María Jesús, Mancebo Zaforas Fco Javier, Manzano Pérez Ángel, Marín Chiva Vicente, Marín Mora Antonio, Martín Baeza Begoña, Martín Fernández Ana, Martín Pacheco Luis Andrés, Martín Rejas Maria Pilar, Martinas Alois, Martínez Rodríguez Carmen Mónica, Melguizo Martínez Mirian, Mengibar Jiménez Javier , Michell Rodríguez Michael, Modol Stefan, Mopocita Mopocita Segundo Víctor, Mora Donoso Encarnación, Mora Valero Mª Teresa, Moral García Julia, Moreno Aragonés Francisco, Moreno Isarch José Ramón , Moreno Santiago Eugenio, Moris Crespo Juan Pablo, Muñoz Lara Juan, Narváez De La Rosa Francisco José, Negru Mariana, Nogales Guerrero Ismael, Novellón Martínez Ines, Orgaz Orgaz Miguel Angel, Pardillos Checa Angel, Parrondo Anton Sonia, Pastor Perez Juan Francisco, Paz Manjón Daniel, Pedraza Pino Josefa, Pedraza Rivero Mirian, Pellicari Lopezosa Roberto, Pérez Mateo Mª Pilar, Pinel Alonso Felipe, Plasencia Hernández Martha Scarlett, Ples Elena, Polo Remartínez Maria Luisa, Popa Ionut, Popescu Emilian, Prieto Humanes Miguel Ángel, Quesada Bueno Francisco Antonio, Ramírez Bedoya John Jairo, Ramos Lozano Laura, Reyes Mateos Miguel, Rodríguez Casanova Jorge, Rodríguez Castell Luis, Rodríguez De La Torre Mª Soledad, Rodríguez Rodríguez Ángel Luis, Rodríguez Sánchez Francisco Javier, Rogado Escribano Ambrosio, Romero Sánchez Cristina, Rzaca Patricia, Rzaca Wieslaw, Sabalete Sánchez Antonio, Sánchez López Sergio, Sánchez Mamajón María Isabel, Sánchez Quispe Juan Antonio, Sánchez-Dehesa Frances Balbina, Santamaría García David, Sanz Morales Juan Carlos, Sanz Pérez Eduardo, Senent Pallarola Guillermo, Serrano Lastra Miguel Antonio, Serrano López Rafael, Sfeatlu Paula Mihaela, Sierra Seron Federico Miguel, Simón González Domnino, Soler Iniesta Maria Susana, Soto Arranz Carlos, Staykova Maria Ivanova, Subervielle Marion Cintia, Suciu Anlexandru Horaciu, Szpila Danuta Teresa, Tenesaca Betancourt José Luis, Toribio Pascual Iris, Torres Mendoza Neil Fernando, Tortosa García Carlos, Tudanca Hernández Maria Teresa, Utrilla Escribano Jesús, Valderrama López José Migel, Valdés Ruiz Saúl, Vega Mingo Mercedes, Vilela Fernández David, Zamora Gutiérrez Juan Ramón, Zokhnyuk Yaroslav, Zsigovszki Csaba.

Premio: Este blog é uma jóia

Mi primer premio -sin contar, claro está, los premios de cuando era pequeño y dibujaba (horrorosamente mal) árboles y postales navideñas-. Este es mi primer premio. Si, se que algunos dirán que se lo dan a muchos y que hay muchos por internet. Pero yo soy una persona que disfruta con las pequeñas cosas. Asi pues -permitanme- disfrutaré con este premio como si el premio Nadal, planeta o cervantes se tratase.

Gracias a Alejandro por el premio, por disfrutar con mis versos y hacerme disfrutar con el rato que nos entregas.



ESTAS SON LAS NORMAS DEL PREMIO:

A-PUBLICAR EL NOMBRE Y LA DIRECCIÓN DEL BLOG QUE LO OTORGA

Alejandro: http://vanas-palabras.blogspot.com

B-ELEGIR 8 BLOGS A LOS QUE QUIERAS PREMIAR. PUBLICAR LOS NOMBRES DE LOS BLOG PREMIADOS.


1- Diario de dos (http://diariod2.blogspot.com/) Por tus pequeños respiros, y tu gran compañía


2- Invitame a vivir (http://invitameavivir.blogspot.com/) por la originalidad de cada entrada, por acoger a todo el mundo y por ayudarme como lo está haciendo.


3- Lucina (http://momentodepalabras.blogspot.com/) Sencillos versos. Sentidos comentarios. Gracias


4- La chica de la trenza pelirroja (http://lmclaura.blogspot.com/)por sus impresionantes análisis políticos y sus historias muy humanas.


5- Pequeña gran superpotencia (http://anacronistadelocaso.blogspot.com/) Por sus visión sencilla y práctica de las cosas. Porque la comparte con nosotros.


6- Acariciando lo aspero (http://karinals.blogspot.com/) Por sus post originales, curiosos y a menudo sorprendentes


7- Mismamente (http://yomismamente.blogspot.com/) Por esas historias que te deja pegado a la pantalla del ordenador.


8- Caminos de ida y vuelta (http://caminosdeidayvuelta.blogspot.com/) Bellos versos con los que comenzar el día.

Y AVISAR DEL PREMIO A CADA UNO DE ELLOS .


Gracias a todos los que me leeis por vuestros comentarios. Espero que sigamos mucho tiempo más compartiendo lunes en verso y semanas diferentes.

Un violinista en el metro

Esta historia me llegó por casualidad -como llegan las grandes historias- y no pude resistirme a compartirla con todos vosotros. Quizá -nunca me gustó ser prefeta- cambie un poco nuestro punto de vista.

Un hombre se sentó en una estación del metro en Washington y comenzó a tocar el violín, en una fría mañana de enero. Durante los siguientes 45 minutos, interpretó seis obras de Bach. Durante el mismo tiempo, se calcula que pasaron por esa estación algo más de mil personas, casi todas camino a sus trabajos.

Transcurrieron tres minutos hasta que alguien se detuvo ante el músico. Un hombre de mediana edad alteró por un segundo su paso y advirtió que había una persona tocando música.

Un minuto más tarde, el violinista recibió su primera donación: una mujer arrojó un dólar en la lata y continuó su marcha.

Algunos minutos más tarde, alguien se apoyó contra la pared a escuchar, pero enseguida miró su reloj y retomó su camino.

Quien más atención prestó fue un niño de 3 años. Su madre tiraba del brazo, apurada, pero el niño se plantó ante el músico. Cuando su madre logró arrancarlo del lugar, el niño continuó volteando su cabeza para mirar al artista. Esto se repitió con otros niños. Todos los padres, sin excepción, los forzaron a seguir la marcha.

En los tres cuartos de hora que el músico tocó, sólo siete personas se detuvieron y otras veinte dieron dinero, sin interrumpir su camino. El violinista recaudó 32 dólares. Cuando terminó de tocar y se hizo silencio, nadie pareció advertirlo. No hubo aplausos, ni reconocimientos.

Nadie lo sabía, pero ese violinista era Joshua Bell, uno de los mejores músicos del mundo, tocando las obras más complejas que se escribieron alguna vez, en un violín tasado en 3.5 millones de dólares. Dos días antes de su actuación en el metro, Bell colmó un teatro en Boston, con localidades que promediaban los 100 dólares.

Esta es una historia real. La actuación de Joshua Bell de incógnito en el metro fue organizada por el diario The Washington Post como parte de un experimento social sobre la percepción, el gusto y las prioridades de las personas. La consigna era: en un ambiente banal y a una hora inconveniente, ¿percibimos la belleza? ¿Nos detenemos a apreciarla? ¿Reconocemos el talento en un contexto inesperado?

Una de las conclusiones de esta experiencia, podría ser la siguiente:
Si no tenemos un instante para detenernos a escuchar los bellos sonidos a nuestro alrededor, por muy extraño que sea el lugar de que procedan, ¿qué otras cosas nos estaremos perdiendo?

Días de soles fríos

Quizá sea esta amarga forma de desviar la mirada
y los besos por el pasillo.
O que el periódico escupe la más triste
de las condiciones humanas.

Será que el paro me deja el tiempo y los bolsillos libres.
Y me aburre pensar en el futuro.
Puede que me haya acostumbrado a él,
o que ambos nos demos la espalda.

Puede que sólo sea que la casa está revuelta
y nuestras manos no se encuentran.
Las caricias se escondieron en un tarro de conservas,
y a menudo, el telediario es un espejo vacío
de esperanza.

Nada importa en estos días en que el sol está frío
y mis huesos no encuentran consuelo.
En los que leo viñeta con la deprimente certeza
de que dicen la verdad.

Serán quizá el miedo a perdernos en esta gris cafetería.
O que nos necesitamos tanto que nos cuesta besarnos.
O quizá –como ocurre casi siempre-
que el mundo se esté desmoronando.

Antes de que despiertes

Antes de que despiertes alejo los fantasmas
de mi lado.
En esta noche en que su presencia me ha hecho
beber de más y escribir versos más tristes.

Antes de que abras tus ojos a los que no oculto nada
me rindo a la paz que descansa en tus labios
y beso tu piel tibia.

Saboreo la libertad eterna de tenerte cerca.
El equilibrio que das a mis erráticas maneras
de quererte.

Antes que despiertes me alejo y te contemplo dormida.
Tus bellas formas silueteando las sábanas,
mi cama desmontadas entre sudor y saliva.

Ahora no hay fantasmas,
y antes de que despiertes y tus manos frías
me rocen la cara, escondo el ron.
Hago unos versos en tu nombre,
y escribo que te amaré antes de que la luz del día
nos desborde.

¿Qué es España?

Hoy me he levantado un poco más reivindicativo -no, no me he levantado a estas horas, llevo despierto unas cuantas ya- y leyendo el periódico de ayer -o releyéndole- me ha interesado una visión sobre España que, para los que no vivan aquí, resultará contradictoria. Sin embargo, España siempre ha sido la tierra del buen vino y la mala conciencia, la envidia solidaria. Siempre hemos sido tierra de caínes y abeles -aunque siempre han abundado más de los primeros- banderas rotas y trincheras que, aunque ligadas y hermanadas, se han matado a pedradas.

¿Qué es España? Soy jóven apra decirlo, pero dejaré que tres documentos hablen por mi.


QUE ES ESPAÑA; COÑO (Jose A. Perez)

En España no se puede ser cineasta sin ser un chupóptero y un pancartero. Si eres periodista, eres parcial. Si eres político, eres mentiroso y cínico. Si eres humorista, eres un lacayo del poder o de la oposición. Si eres independiente, resultas ser equidistante, y si eres equidistante, eres imbécil. Si hablas, eres un bocazas; si callas, un cómplice. Si votas, votes a quien votes, votas mal, y si no votas, no tienes derecho a quejarte. Si no eres nacionalista, eres nacionalista español. Si prosperas, eres un trepa; si no lo haces, un desgraciado. Las ONG son un negocio, la Iglesia otro, y la democracia, un mal menor.

En España, seas lo que seas, lo eres mal, o poco, o mucho. España es un país de excesos y escaseces, de losantos y carod-roviras, y, en medio, una gran masa indignada. En este país todos sabemos que los premios se encargan, que el amiguismo se mete en el currículum y que la verdad es reversible según el viento que sople.
España no es racista, pero los moros están todos medio locos. Aquí todos creemos en la libertad de opinión, pero hacen bien en ilegalizar esos partidos vascos que son ETA, porque son ETA, lo sabes, ¿no? En España tenemos un presidente que no sabe inglés, varios ministros que no saben castellano y una oposición que vuelve en una hora, disculpen las molestias. Tenemos hipotecas más largas que vidas, y banqueros que culpan a los ciudadanos por no vivir lo suficiente. Somos la octava potencia económica mundial y la primera en saber que eso importa un bledo.

España es un desastre de país, como seguramente lo son todos a su manera. Al menos nosotros estamos al tanto de ello. Porque, claro, hay que estar informado para poder atacar a ese idiota de ahí enfrente.

Artículo del blog Malpensando (Público.es)





MATER ESPAÑA (Joaquin Sabina)





Para terminar, Reverte no podía faltar al hablar del apís en que vivimos, aunque nos pese.

UN FACHA DE SIETE AÑOS

Cosas que el tiempo no ha borrado

Hace tiempo que mi alma se ató
a tus caderas.
Que se instaló en mí la necesidad de besarte.
De oler tú aroma. Enloquecer mis noches
en tu ausencia.

Hace tiempo que el frío acompaña mis ideas.
Quizá piense más claro,
o nunca lo haya hecho y disimule.
Necesidad de encontrarte en cada verso.
De rimar tu cama y mis sueños,
tus labios y mi cuerpo.

Hace tiempo que procuro hablar más
y callar menos.
Mentir para conseguir tus manos
anudadas a mis dedos.
Buscar en ti consuelo, escucharte
por el placer de hacerlo.

Olvidarme de desastre que absurdamente
alimento.
Pasear en un mundo paralelo.
Compartir nuestra vida en aspectos
que son nuestros.
Desayunos en el mismo bar,
con la misma intención de retenerte
un rato más a mi lado.

Hace tiempo que te hablo de paraísos
y escenarios en donde decir te quiero,
y que no suene oxidado.
De viajes que aún no hacemos,
de abrazos que reservamos.
De vivir juntos aunque todavía no tengamos
un techo donde cobijarnos.

En fin, te hablo de que hace tiempo
que no te olvido.
Quizá por la absurda idea de protegerte.
Quizá porque te necesito.

Un Post por Palestina



QUIZÁ ALGÚN DÍA SEA TARDE, Y NUESTROS DIRIGENTES SE LAMENTEN DE NO HABER HECHO NADA POR EVITARLO…



...QUIZÁ LA AYUDA LLEGUE. QUIZÁ NO TODO ESTÁ PERDIDO. PERO ES MUY PROBABLE QUE EL ODIO DEL PALESTINO CREZCA COMO AHORA CRECE EL TEMOR A CADA NOCHE ILUMINADA POR LOS COHETES, CADA NIÑO MUERTO, CADA FUTURO SEGADO. CADA PIEDRA QUE VUELVE EN FORMA DE BALA. CADA LÁGRIMA NO SECADA…



...COMO AHORA SE LLORA POR LOS MUERTOS SIN ENTIERRO, LOS HOSPITALES ABARROTADOS DE FALSAS ESPERANZAS, DESESPERANZA, O EN CASAS DERRUIDAS DONDE SE LLORAN LOS SUEÑOS BAJO LOS ESCOMBROS. FAMILIAS QUE MAÑANA LLORARAN A LOS MIEMBROS QUE SE FUERON, QUE NO REGRESARON A RECONSTRUIR EL PUEBLO ARRASADO POR LA VENGANZA, POR LA IRA IRRACIONAL DEL QUE OPRIME A SU HERMANO…



…PERO LO PEOR DE TODO, SERÁ LEVANTARNOS Y VER QUE EN OTRO LUGAR, EN OTRO TIEMPO, EL ODIO QUE INTENTAMOS SALVAR NO HA MUERTO. Y ENTONCES, LLORAREMOS. LO HAREMOS POR CADA VIDA QUE NO RESCATAMOS, CADA CONDENA QUE NO EJERCIMOS, CADA PISTOLA QUE -AUNQUE NO DISPARAMOS- PERMITIMOS. LOS HAREMOS POR CADA BALA DIRIGIDA A UN NIÑO.


Rompamos nuestro silencio. Condenemos esos atentados. Y luego, seamos los primeros en celebrar la paz.



Viñetas extraídas de la edición digital del diario público (www.publico.es). Gracias a Manel Fontdevila y a Territorio Vergara por seguir condenando esta masacre.